martes, 4 de agosto de 2009


-Y así me siento yo, muerta en vida, como un mosquito, menos que un mosquito, no me ven, y como no me ven no les importa que yo sufra. ¿Qué le importa que yo sufra si no me ve? ¿Qué le importa lastimarme si no existo? No me ven.
- Todos te vemos y amamos.
- No me aman, a veces los hago reír pero amarme de verdad, verme de verdad, importarles de verdad ¿a quién? A nadie.
- A mí, a mí me importas y mucho.
- Si, pero me falta un golpe de horno ¿no?
- Si, te falta un golpe de horno, pero a mí también, a todos nos falta un golpe de horno acá. Pero por eso estamos acá, para aprender, para crecer. Sabes que yo antes me sentía como vos, igual, insignificante, invisible, igual que vos.
- Vos sos distinta, vos brillas, hagas lo que hagas todos te ven, y a mí no.
- No me parece que sea así, para nada.
- Es lo que pienso. Y te juro que ya no tengo más fuerzas para ponerle actitud.

[Cuántas veces uno se siente invisible, y qué mal que te pone, ja.]

No hay comentarios:

Publicar un comentario